"Como un hombre solitario que se detiene a escuchar una canción de amor.....esta sale melodiosa de la desgarrada garganta de un mendigo, tirado en los adoquines fríos de cualquier ciudad.
El hombre no piensa en ofrecerle una limosna triste y barata;
corta una esplendida rosa del ramo que lo acompaña y se la ofrece con calor y reconocimiento.
A lo bello de la vida hay que pagarle con cosas bellas.
No todo el mundo sabe ver la belleza en las personas que se cruzan en su vida...
pero ellas aun con sus problemas y miserias merecen ser reconocidas."
Noelia
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