Sorprende esta oración de un niño hacia su Dios.
¿Que estamos haciendo para que el niño quiera convertirse en un objeto inanimado?
Solo es un grito de ayuda, solo busca cariño y atención de quienes lo rodean.
Triste.
Noe.
“Señor, esta noche te pido algo especial, quisiera convertirme en un
televisor, quisiera ocupar su lugar. Quisiera vivir lo que vive la tele
de mi casa. Es decir, tener un cuarto especial para mi y reunir a los
miembros de mi familia a mi alrededor. Ser tomado en serio cuando hablo y
convertirme en el centro de atención al que todos quieren escuchar, sin
interrumpirle ni cuestionarle.
Quisiera sentir el cuidado especial que recibe la tele cuando algo
no funciona y tener la compañía de mi padre cuando llega a casa, aunque
esté cansado del trabajo. Y que mi madre me busque cuando esté sola y
aburrida , en lugar de ignorarme. Y que mis hermanos se peleen para
estar conmigo. Y que pueda divertir a todos, aunque a veces no les diga
nada. Quisiera vivir la sensación de que lo dejan todo para pasar unos
momentos a mi lado.
¡Señor, no te pido mucho, sólo vivir lo que vive cualquier televisor! “
No hay comentarios:
Publicar un comentario